Hola. Con la primavera avanzada, empiezo a cambiar el tipo de recetas buscando algo más ligero y fresquito. Confieso que no soy dada a preparar postres, pero he encontrado una receta irresistible: fácil, rápida, saludable, refrescante y deliciosa. ¿se puede pedir más?
Seguro que nunca se te hubiera ocurrido hacer natillas con maíz; pues aquí te traigo la receta que hice en un curso de Isabel Moreno de Macrosano.
Sobre la polenta o sémola de maíz debes saber que es un alimento sin gluten. Antes que nada, recuerda consumirla siempre ecológica. Es rica en hidratos de carbono complejos, (de asimilación lenta), por lo que te dan energía de larga duración y tienen un efecto saciante. Aporta fibra, vitaminas A y del grupo B, y cuenta con minerales como el magnesio, el calcio, fósforo, potasio, etc… Pero su aporte nutricional no es demasiado significativo por lo que se aconseja consumirlo con otros alimentos más ricos en nutrientes.
Según la Macrobiótica, el maíz es el cereal más yin, por lo tanto es expansivo y refrescante, adecuado para las estaciones calurosas. Nutre el corazón, tonifica los riñones, es diurético e influye en el estómago, ayudando a regular la digestión.
Ponte el delantal y nos ponemos manos a la obra.

INGREDIENTES (para 6 bols)
1 tacita de polenta fina (tamaño café solo)
10 a 12 tacitas de bebida de arroz
Vaina de vainilla unos 3 a 4 cm
Una pizca de sal
PREPARACION
Abre la vaina de vainilla con un cuchillo afilado, y raspa el interior para separar las semillas del interior.
Coloca en una cacerola las semillas y la vaina de vainilla junto con la polenta y la bebida de arroz. (con 12 tacitas las natillas se quedan ligeras, si te gustan más espesas, añade sólo 10 tacitas). Añade una pizca de sal y pon la cacerola al fuego con tapa. Utiliza el fuego más pequeño, y si puedes, utiliza difusor. Cocínala durante 30 minutos, removiendo de vez en cuando. La polenta podría estar preparada en 10 minutos pero la dejamos más tiempo al fuego para que se infusione bien la vainilla y la natilla coja su sabor.
Pasados los 30 minutos, prueba el sabor. Si te gusta más dulce, añade un poco de melaza de arroz. Ahora tritura la natilla con una batidora para deshacer los grupos que queden y si quieres que se quede todavía más fina, pásala por un colador.

Reparte la natilla en bols individuales y espera algunas horas hasta que esté bien fría y se espese un poco.
A la hora de servir, puedes espolvorear un poco de canela (a mí se me olvidó…)

A disfrutarlas como postre, como tentempié, en casa, en la oficina, de picnic, ….